domingo, noviembre 23, 2008

POR LOS RINCONES DE MANOLETE










Hace unos días estuvimos mi hermana y yo visitando Córdoba y la verdad es que nos ha encantado. Siempre teníamos en mente visitar esta bella ciudad andaluza, entre otras razones, por ser la ciudad donde nació uno de los toreros más grandes de la historia del toreo: Manuel Rodríguez “Manolete”.
Por eso, aparte de visitar los lugares más importantes de la ciudad, pues hicimos un recorrido por los rincones que tuvieron algo que ver con la vida del gran torero cordobés.
Fuimos a la plaza de Santa Marina donde hay un impresionante monumento a la figura del maestro y aprovechamos para entrar a la Iglesia que está justo al lado. A la salida, vimos a un cura y aprovechamos para preguntarle si esa era la Iglesia donde se bautizó, pero nos dijo que no, que donde se bautizó fue en la parroquia de San Miguel, a si es que nos pusimos rumbo al lugar buscando y preguntando hasta que dimos con ella. Además nos contó donde estaba La Lagunilla, el lugar donde vivió Manolete de niño y para allá que nos fuimos. Es una plaza muy hermosa que también tiene un pequeño busto del maestro.
Ya por la tarde decidimos irnos en busca de la Avenida de Cervantes, para localizar la casa que compró el maestro cuando ya comenzó a ganar dinero y a ser un torero importante. Al principio no dábamos con ella, pero finalmente la encontramos, pues habíamos visto alguna foto de la casa en algún libro. Fue muy bonito aquel momento y más aún cuando decidimos subir las escaleras de mármol blanco que nos llevaban hasta la entrada. Tocamos el timbre y un chico joven nos recibió muy amablemente. Nos dijo que efectivamente esa había sido la casa de Manolete y que ahora la había adquirido una inmobiliaria. Nos dejó pasar a una sala en la que había cuadros, esculturas y recuerdos del maestro y fue el mejor momento de nuestra visita a Córdoba, el poder estar en aquel lugar es algo que no podremos olvidar.
Tras la visita a la casa de la Avenida de Cervantes, nos fuimos hasta la plaza de Capuchinos donde está el Cristo de los Faroles y un señor mayor que estaba poniéndole flores al Cristo nos mandó hasta la calle Torres Cabrera para ver la casa donde nació el maestro. Lo único que no visitamos fue el cementerio para ver su mausoleo, pues no tuvimos tiempo de hacer esa visita, pero en nuestros planes está para otra ocasión.
Os muestro algunas imágenes de ese día ya inolvidable para nosotras, pues fue muy hermoso poder recorrer algunos de los rincones impregnados de la vida de nuestro admirado maestro.
María José Borrega Fresneda